Mi amor:
Fuimos los elegidos para cuidar este angelito que nos entregó la vida ... Shlomit , nuestra pequeña paz.
4 años son ya desde que no está con nosotros.
Su fugaz pero intenso paso por esta vida, nos marcó para siempre, a fuego vivo ... marcó nuestra familia y nuestras almas con dolor, con pena, con sacrificio .
Nos dio una lección de vida, nos enseñó a enfrentar estas difíciles situaciones, y salir engrandecidos de ellas, como personas, y como familia.
Nos enseñó que la forma de enfrentar estas situaciones extremas es haciéndolo juntos, de la mano, con la fuerza del amor que le tuvimos a ella y que nos tenemos entre nosotros ; es la herramienta que nos enseñó a utilizar nuestro angelito.
También nos enseñó a utilizar nuestra fuerza interior para logar pararnos despues de las pruebas mas fuertes ...
a darnos cuenta de las cosas realmente importantes de la vida ...
a darnos el tiempo para mirarnos a los ojos y darnos cuenta que estamos ahí el uno para el otro ...
tal cual como estuvimos para nuestra hija, incondicionalmente, sin saber cual sería el desenlace, pero aprovechando cada segundo al máximo con ella .
Nos enseñó a dar amor incondicional, sin esperar nada a cambio ... a siempre tener esperanza sin importar lo oscuro que se vea el futuro.
Nos enseñó a tomar nuestras heridas del alma, ponerlas en la espalda y seguir adelante .
Nos enseñó a seguir adelante con nuestras penas profundas, y aprendimos a hacerlo, de la mano, como familia, y ya llevamos 4 años.
Te invito a que sigamos juntos como familia el camino, el aprendizaje, la vida, por ella, por nosotros, por nuestras bella familia, con el recuerdo presente e intenso de nuestra shomi, con el recuerdo presente de nuestra pequeña paz.